One of the most moving moments was the “blessing of the animals” in honor of Saint Francis. Among those present, Oreo, the cat of Carolina and Jesus, stood out. With his size and beauty, he drew everyone’s attention. His presence reminded us that all creation praises God and that we are called to care for it with gratitude and love.
We also shared important announcements for parish life:
• Our upcoming spiritual retreat at the monastery on October 25 already has more than 40 people signed up. It will be a time of prayer, silence, and renewal in faith.
• We joyfully announced the beginning of our youth group, which will meet every second Saturday of the month, from 4 to 7 pm. After their gathering, the youth will participate and serve at the Saturday Mass alongside Father Cooper. The first meeting ended with a small “raffle donation,” and with the money raised, pizzas will be purchased for the group.
• The second Sunday of every month will be dedicated to community celebrations such as: birthdays and other special intentions.
We are also blessed to have a Youth Folkloric Dance Group led by Flor and Francis which meets every Friday at 7 pm at the parish. All young people are invited to join! This space is an opportunity to grow in culture, and friendship while expressing joy through music and dance.
Our parish is growing little by little. Saturday Mass is celebrated at 5 pm and Sunday Mass at 9:30 am. Our various ministries are also strengthening: altar servers, the Eucharistic ministry, the offertory, the care of the altar (with the service of Kellie, Tabin, pYaneth, and Angélica), and especially the music ministry, which already includes Carlos, Manuel, the children of Érica, and more than six members offering their gifts to the Lord.
All of this is a sign that God is guiding and blessing us. Just as Oreo surprised and delighted us today, God’s grace continues to appear among us in simple and beautiful ways. The invitation is to keep walking together, with living faith and grateful hearts.
Father Jose
Hoy en San Nicholas of Myra vivimos un día muy especial, lleno de fe, alegría y comunidad. La celebración dominical estuvo marcada por las lecturas que nos recordaron la importancia de la fe —esa fe que, aunque sea pequeña como un grano de mostaza, puede mover montañas— y por las actividades que nos unieron como familia parroquial.
Uno de los momentos más emotivos fue la bendición de los animales en honor a San Francisco. El Padre Michael y el Padre José bendijeron a Oreo, el gato de Carolina y Jesús, que con su tamaño y belleza atrajo la atención de todos. Su presencia nos recordó que toda la creación alaba a Dios y que estamos llamados a cuidarla con gratitud y amor.
También se compartieron anuncios importantes para la vida parroquial:
• Nuestro próximo retiro espiritual en el monasterio, el 25 de octubre, ya cuenta con más de 40 inscritos. Será un tiempo de oración, silencio y renovación en la fe.
• Con alegría anunciamos el inicio de nuestro grupo juvenil, que se reunirá cada segundo sábado del mes, de 4 a 7 pm. Después de su encuentro, los jóvenes participarán y servirán en la misa del sábado junto al Padre Cooper. La primera reunión concluyó con una pequeña “rifa donation”, y con lo recaudado se comprará pizza para ellos.
• El segundo domingo de cada mes estará dedicado a las celebraciones de la comunidad: cumpleaños y otras intenciones especiales.
También contamos con un Grupo de Danza Folklórica Juvenil, dirigido por Flor y Francis, que se reúne todos los viernes a las 7 pm en la parroquia. ¡Todos los jóvenes están invitados a unirse! Este espacio es una oportunidad para crecer en la cultura y la amistad, expresando la alegría a través de la música y la danza.
Nuestra parroquia va creciendo poco a poco. El sábado celebramos la misa a las 5 pm y el domingo a las 9:30 am. Se van fortaleciendo los distintos ministerios: los monaguillos, el ministerio de la Eucaristía, la colecta, el cuidado del altar (con el servicio de Kellie, Tabin, Yaneth, y Angélica), y de manera especial el ministerio de música, que ya cuenta con Carlos, Manuel, los niños de Érica y más de seis personas que entregan sus talentos al Señor.
Todo esto es un signo de que Dios nos guía y nos bendice. Así como Oreo nos sorprendió y nos alegró hoy, la gracia de Dios sigue manifestándose en medio de nosotros de maneras sencillas y hermosas. La invitación es a seguir caminando juntos, con una fe viva y un corazón agradecido.
Padre Jose
RSS Feed